El sentido de la vista es delicado y en el caso del caballo es uno de los mas perfectos, dado que puede distinguir los objetos de cerca y de lejos, tanto de día como de noche.
Los ojos de los caballos deben ser grandes, estar bien abiertos y situados lejos de la nuca y sobresaliendo un poco del cráneo. Con una expresión fiera y dulce, sus características atestiguan su inteligencia, su carácter y su raza. Por el contrario los ojos cercanos a las orejas denotan un menor desarrollo del encéfalo, por lo que las facultades mentales del caballo están disminuidas ( se da mucho en crías de cruzas consanguíneas).
Los párpados deben ser finos, flexibles, muy móviles, provistos de pelos cortos y de largas pestañas bien alineadas. El borde debe describir un arco bien definido y regular, si estuviese plegado o con irregularidades podría dar lugar a lagrimeos periódicos y a otras molestias.
La conjuntiva es de color rosa normalmente , pero si esta pálida nos muestra un estado de anemia o si su color es muy rojizo, indica inflamación en algún órgano.
Los ojos deben expresar dulzura, inteligencia e inspirar confianza.
Los ojos pequeños, son los que están hundidos en la órbita y escondidos debajo de unos párpados espesos y poco móviles, indican un temperamento linfático y una predisposición al lagrimeo periódico.
Si los ojos están muy cubiertos por los párpados, denotan un carácter sombrío o difícil.
Los ojos pequeños, son los que están hundidos en la órbita y escondidos debajo de unos párpados espesos y poco móviles, indican un temperamento linfático y una predisposición al lagrimeo periódico.
Si los ojos están muy cubiertos por los párpados, denotan un carácter sombrío o difícil. |