Ensillar un caballo no es tarea fácil, requiere de conocimientos tales como: siempre hacerlo del lado izquierdo, chequear limpieza del lomo como también que esté sano, asegurarse que el sudadero esté correctamente colocado sin arrugas y en el lugar correcto, colocar la cincha en la posición que permita al caballo respirar adecuadamente, asegurar que esté bien cinchado para evitar la rotación o movimiento de la montura, la silla de montar debe quedar en el centro de gravedad del caballo (para lo cual debemos conocer bien nuestro caballo), los estribos deben quedar a la altura de cada jinete y bien colocados a cada lado. Como puede apreciarse la montura está compuesta por diferentes accesorios: la sudadera que es lo que se coloca directamente sobre el caballo, encima van las matras que son tejidos de lana u otros materiales gruesos y coloridos (en algunas partes de Argentina no se usa sudadera sino directamente las matras), después va la carona. Todo va sujetado con una cincha que es un cuero en forma de tira que tiene dos partes y permite sujetar. Es sobre esta parte que se encuentran las estriberas con los estribos (ajustables en función de la altura del jinete). Finalmente, se coloca el cojinillo y un cinchón. El apero completa nuestra preparación para montar. Está compuesto por: el bozal, el freno (cabezada, riendas, rebenque) y algunos gauchos agregan el maneador, la manea, el lazo y otros accesorios como las boleadoras. Pero esto ya no es tan habitual hoy en día.